Un visitante incómodo

Con los números sobre la mesa, el Sporting lleva a estas alturas del campeonato los mismos puntos que la pasada campaña (11). Sin embargo, la primera victoria a domicilio llegó en la decimoquinta jornada, en el Ángel Carro, ante el Lugo (1-3). En aquella ocasión, los rojiblancos remontaron el tanto inicial de Seoane para llevarse los tres puntos -Luis Hernández, Lekic y Scepovic fueron los goleadores-. La segunda victoria lejos de Gijón llegó dos semanas después, en el Rico Pérez frente al Hércules (0-1), en un partido en el que marcó Santi Jara. Hasta entonces, se habían logrado entre medias cinco empates.

Hace dos temporadas, vencer fuera de casa era la asignatura pendiente del conjunto sportinguista. Aunque también se arañaba algún empate, en la primera vuelta sólo se venció al Castilla (2-4), en la jornada 11. Marcaron Carmona, Bilic, en dos ocasiones, y De las Cuevas. Para lograr el segundo triunfo hubo que esperar de nuevo a visitar el Ángel Carro (1-2) en la vigésimo quinta jornada, donde anotaron Guerrero y Trejo.

Seriedad lejos de El Molinón

En los encuentros igualados, y en Segunda la mayoría de ellos lo son, es el equipo local el que trata de mantener la posesión del balón para llevar la iniciativa. En estas circunstancias, los rojiblancos se mostraron cómodos. Tanto en Soria como en Albacete, el Sporting priorizó una defensa ordenada, a la espera de sus oportunidades a la contra. Una seriedad que también mantuvo en Miranda de Ebro, donde logró mantener por fin la portería a cero.

Muchos fortines le quedan por delante a los rojiblancos esta temporada. El primero de ellos será el Estadio de Gran Canaria de Las Palmas, el próximo 4 de octubre. Un escenario en el que el conjunto local cuenta por triunfos sus tres partidos disputados en él y donde solo ha encajado un gol. Con todo, ninguno llegó a ser por siempre inexpugnable.