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A. MAESE
GIJÓN.
Domingo, 14 de enero 2018, 02:16
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Michael Santos vive su mejor momento como futbolista desde que llegó a Gijón. Ayer, volvió a encontrar el camino al gol gracias a un regalo de Casto, el guardameta del Alcorcón. «Espero seguir con esta dinámica», aseguró el atacante, que ayer celebró dos goles, aunque en realidad solo marcó uno.
En el primero de ellos, el delantero festejó el tanto como si hubiera sido suyo cuando en realidad Dorca, en propia puerta, marcó para alegría de El Molinón. «Yo sentí algo, pero no sé si fue un diente o la pelota», explicó entre risas el uruguayo.
El que sí tuvo su firma fue el tercero. Una vez que el balón entró y sus compañeros le felicitaron, miró a la grada e hizo el gesto de escanciar sidra y después beber. «Lo celebré así porque me gusta mucho la sidra. Además tenía pendiente esa celebración», afirmó el máximo goleador del equipo.
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