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Sábado, 17 de marzo 2018, 03:27
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Clausurada la sesión de vídeo, justo antes del inicio del entrenamiento, la plantilla del Sporting se encaminó hacia el número 1. Pronto se detectó la ausencia del italiano Federico Barba, que tiene un edema en el cuádriceps. Pero en ese primer golpe de vista sí que se vio a Alberto Guitián, que se recupera de una contractura y que confía en llegar a tiempo si no experimenta ningún retroceso, además de a Álex Pérez, quien completó el calentamiento para luego retirase. El madrileño quiere regresar a la competición lo antes posible, aunque todo sigue atado a los plazos establecidos para su evolución.
Con la disyuntiva Guitián-Barba se adentra Rubén Baraja en el final de la semana. Lo del defensa romano parece serio, como evidencia el hecho de que los servicios médicos le catalogaban ayer como «seria duda», con la sensación de que podría no llegar a tiempo, aunque todavía faltan dos jornadas de entrenamiento por delante. Tampoco estuvo en el entrenamiento con el grupo Hernán Santana, con un edema en el sóleo, ni Juan Quintero, con una micro-rotura, al igual que Nano Mesa y Lora, con sendas sobrecargas. Todos estos, en cualquier caso, son recuperables.
Si se confirma la baja de Barba, el defensa del filial Víctor Ruiz, que ayer volvió a entrenarse a las órdenes de Baraja, ganaría enteros para entrar por primera vez en la convocatoria del primer equipo y dar más amplitud al centro de la defensa, que ahora mismo tiene a Guitián, si se recupera, y Juan Rodríguez como centrales específicos. Ante las ausencias, el técnico vallisoletano completó el entrenamiento con los futbolistas del filial ya citados, así como Nacho Méndez, Dani Martín, Isma Cerro, Pelayo, Pedro Díaz y los juveniles Iván Elena y Miguel Prado.
Por otra parte, Rubén García anticipó sobre el choque del lunes que «somos conscientes de que vamos a un campo en el que será muy complicado ganar», recordando que «el Huesca es el líder y está siendo el mejor, pero nosotros venimos en una buena dinámica y vamos con mucha ilusión de poder hacer algo grande allí para volver con los tres puntos». En ese sentido, el mediapunta no ocultó que «esta va a ser una semana clave», aunque insistió en que «no hay que mirar más allá del próximo partido», recordando que «si conseguimos una victoria estaremos más cerca del ascenso directo».
El futbolista cedido por el Levante, que se está convirtiendo en una de las referencias del ataque del Sporting, desveló también que lleva varios meses compitiendo y conviviendo con una fractura en el cúbito de su brazo izquierdo, explicando que «por suerte no fue una fractura muy abierta y he podido seguir jugando».
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